Hoy he encontrado interesante la clase de Psicología del Desarrollo I. Me ha hecho reflexionar sobre cuanto y cómo difiere mi cerebro respecto al normotípico y ayudado a entenderme un poco más.
Yo no prevengo de una familia de eruditos estudiosos ni científicos de renombre, provengo de una familia humilde y trabajadora cuya vida ha sido el trabajo duro y la resiliencia. Por eso quizás en mi entorno familiar resultase extraño que una niña de 9 meses 'Hablase como una vieja'.
Hoy he descubierto que tener iniciativa propia a la hora de hacer muecas o señas se desarrolla a partir de los 18 meses y no he podido evitar recordar cuando la abuela se asustó porque le puse 'Cara de vieja' sin saber que había aprendido a hacer esas mímicas y se asustó porque pensaba que me estaba dando algo.
A ver, yo siempre pensé que era algo rara o demasiado profunda/reflexiva. Pero me decía que ese mundo interior era precisamente eso, interior y que cómo no se veía todos los demás debían tenerlo. Sólo qué para socializar mostraban su faceta más frívola o divertida. Cómo si la faceta social y la reflexiva fuesen dos aspectos a separar y utilizar en función del contexto. Pero al parecer esa reflexividad que yo tenía ya a mis 9 años en un desarrollo normotípico surge a partir de los 11 años de edad. Y esa faceta frívola no era faceta, era literalmente la personalidad de mis compañeros.
Ahora entiendo mejor porque siempre me sentía tan sóla aún rodeada de gente... Dos años de desarrollo psicológico es mucho tiempo y un salto grande en la vida de un niño.
Ahora te entiendo mucho mejor, pequeña Nay. Un abrazo enorme 🫂.
P.D.: Ese cuadro fue lo que pedí de regalo cuando me preguntaron qué quería por haber aprobado todo en PRIMARIA.
Nay Góngora, 20/10/25


















